Briefing
Vivienda de 40m2 en planta baja que dispone de cocina, salón-comedor, dos habitaciones y un baño, situada en el patio interior de un edificio del Eixample de Barcelona. El piso se presentaba con materiales desfasados, oscuros y graves problemas de humedad.
Proyecto
El nombre del proyecto nace de la sensación de salir del denso ensanche de Barcelona, entrar en patio escondida y descubrir esta pequeña casita que nos llena de calma, bienestar y calidez.
Hemos apostado para abrir al máximo los espacios agrupando salón-comedor, cocina y estudio. A pesar de estar conceptualmente sectorizados para el desarrollo de las diferentes actividades, los espacios se perciben amplios, las circulaciones son muy intuitivas y todo queda aprovechado sin apretarlo. Separamos la zona de día de la zona de noche con dormitorio, baño en suite y vestidor.
Los materiales también tienen una conexión con la distribución ya que se han pensado para complementarse. Hemos apostados por un pavimento continuo del tipo microcemento, transpirable y duradero en tono neutro, claro y limpio.
Los espacios se diferencian por el mobiliario pero la percepción se hace más grande al no presentar límites en suelo o tabiques. La bovedilla catalana se ha tratado de forma distinta según el espacio que define. En el dormitorio la dejamos repicada con una pátina empolvada, en salón de color terroso natural y en cocina-comedor-estudio enyesada en blanco.
Al tratarse de una planta baja, se ha tenido máximo cuidado que el piso respire y evitar humedades, Por este motivo, propusimos el repicado de las paredes de obra visa en todo el perímetro de fachada; en algún caso a media altura con la parte superior enyesada y pintada aportando luz, en otra en su totalidad buscando un efecto de profundidad y sensación de amplitud.
Para contrarrestar el estilo tradicional existente de base, a nivel de materiales hemos elegido una estética más setentera apostando por una gama cromática neutra donde dominan los rosas y toques de verde-mint. Se generan golpes de potencia con elementos tales como el frontal de terrazo más marcado en el baño y las luces de diseño.
El reto más importante ha sido equilibrar las paletas cromáticas para conseguir un espacio armonioso y fresco. Con los varios tonos terrosos y rosas, aplicados en diferentes grados de brillo y saturación, creamos un ambiente tranquilo y confortable. Para compensar, el suelo gris reluciente permite refrescar el espacio aportando luminosidad y amplitud. El resultado es un piso muy acogedor que transmite energía positiva y sensación de confort.
Situación: Barcelona I Año: 2021 I Superfície: 40m2
"Un arquitecto es un dibujante de sueños"
Categoría: Vivienda
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